Ismael nos relata su experiencia londinense y la movilidad de prácticas Erasmus+

Me cuesta definir mi estancia en Londres debido a que ha sido una experiencia dual.
El inicio fue bastante duro, ya que opté por venir a Londres y buscar empresas. El impacto con otra cultura, la dificultad para comunicarte, vivir 4 semanas en un hostal hasta encontrar casa, estar solo ante una ciudad como Londres… Me sentía más inseguro, con falta de identidad, una bomba emocional que no sé cómo explicar. Era la tercera vez que salía de España y no era del tipo, viaje de instituto a Italia.

Pero al mes, encontré un estudio de fotografía de comida que aceptaba mis prácticas, y el programa Erasmus lo facilitó mucho. La experiencia en el estudio ha sido genial, porque era pequeño y el fotógrafo me cuidaba mucho, fue paciente conmigo. En 4 meses se produjo el cambio, las últimas semanas la relación era más relajada y esa barrera inicial del idioma ya estaba disuelta. Respecto a las practicas, todos los aspectos positivos, siendo honesto la fotografía de comida no es mi campo, pero sí lo es estar metido en un estudio. He disfrutado mucho y me dio mucha pena finalizarlas.

Una de las peores cosas de Londres, es el nivel económico que necesitas para vivir aquí, pago 600 libras por mi habitación y cada viaje de metro me cuesta entre 2,40 – 2,90 libras. Vine con un respaldo económico, la beca no es mucho, pero ayuda. Londres ofrece mucho, puedes descubrir miles de cosas y no estás viendo más que una pequeña parte, el acceso a actividades culturales es una pasada. Me encanta, a pesar del mal tiempo, LOL. Pero lo bueno se acabó junto con el dinero y me tocó ponerme a trabajar.
Por suerte encontrar un trabajo en Londres que se compagine con las prácticas es bastante sencillo. Tuve suerte y empecé en un bar como barback (puliendo las copas y los vasos básicamente), pero al mes me pasaron a waiter (atendiendo mesas). El lenguaje es más coloquial… y es una forma de seguir aprendiendo el idioma, cuando estas inmerso en él. Londres es multicultural, en mi trabajo hay estas nacionalidades: rusa, argelina, letona, lituana, italiana, francesa, colombiana y ecuatoriana.

Cuando miro hacia atrás, creo que es una experiencia que no cambiaría.
Aquí son importantes las referencias para todo, ya sea trabajo, casa, banco… por lo que haber empezado con unas prácticas Erasmus me facilita que vaya a encontrar trabajo de fotografía en unos meses. Del programa Erasmus mejoraría la ayuda económica y que fuese más fácil tener una empresa. Animo al que tenga la oportunidad que se lance, porque creo que muchas veces es el miedo lo que nos inmoviliza y aunque al principio pueda costar, el poder hablar un idioma en común elimina muchas fronteras y da mucha libertad.
