La experiencia de J.R.Campillo de Modelismo industrial, en movilidad Erasmus+ en Dublín.
Lo mejor de todo, sin duda, aparte de las personas, fue el NCAD. Me ha encantado y tengo recuerdos muy bonitos de allí, en toda la escuela se respira arte. Alberga estudiantes de diseño de moda, gráfico, industrial, multimedia, así como a diferentes tipos de artistas plásticos, gente que se dedica a joyería, cerámica, escultura, o pintura… De hecho, las exhibiciones de fin de curso son dignas de ver; es un centro cultural durante un par de semanas. En la Escuela se respira tolerancia y respeto. No es muy grande, con espacio en otros edificios cercanos, pero tiene mucho encanto. Parte del edificio fue una destilería de whisky reformada y ampliada. Los alumnos intervienen en la Escuela o en un lugar de encuentro de la escuela, llamada Red Square.
La asociación de estudiantes de la escuela es muy activa y a lo largo del curso organizan diferentes fiestas temáticas o según eventos, comienzo de curso, Halloween, San Valentín, Navidad, etc.
El Departamento de Diseño de Interacción y de Producto, en el que estudié es uno de los mejores, tienen un taller muy completo, con máquinas cnc grandes e incluso torno y fresa mecánicos, corte láser, impresoras 3d, moldeado por termoconformado, estación de soldadura… La vida académica se desarrolla en un aula en la que cada alumno tiene su mesa y su parte en el estudio. Así trabajas en tus propios proyectos o bien interactuando con tus compañeros de clase. De vez en cuando hay pequeñas clases magistrales o bien de los tutores hablando de los proyectos en curso, o sobre asuntos o conceptos teóricos que son convenientes a tener en cuenta para los proyectos, para practicar o investigar.
Smiley y presentaciones forced migration
La enseñanza es muy diferente, se trabaja por proyectos estructurados para obtener conocimientos en su desarrollo. Hay entregas y exposiciones con frecuencia, recibes valoraciones y calificaciones, pero en general hay una gran libertad creativa y de aprendizaje por cuenta propia, los tutores y especialistas siempre están a tu disposición. Los profesores son en su mayoría diseñadores e ingenieros, algunos están en activo. Los proyectos trataban sobre diseño centrado en el usuario, o de diseño social para refugiados, otros eran sobre función o forma, o bien centrado en la manufactura o la sostenibilidad o en la biomímesis. Todo muy bien organizado por el departamento.
Creo que he aprendido muchísimo, sobre todo por contraste y comparación. Los primeros meses hay que adaptarse a la independencia, creo que de verdad te conoces cuando te encuentras sólo ante una situación nueva, y de verdad te descubres a través de tus relaciones con el mundo, laborales, sentimentales o de amistad. Una vez que te has adaptado es tiempo para aprender y disfrutar y más tarde lo es para comparar con lo que conocías de antes. Con el tiempo valorarás y serás más crítico con tu familia, con tu país y contigo mismo. Sonará cursi, pero quiero más a mi país, a mi ciudad, a mis amigos, a mi profesión y a mi familia más ahora que antes, aunque también soy mucho más crítico con todo.
Cuando llegué a Dublín pensé que, aunque todo fuese mal, merecería la pena. Creo que he tenido mucha suerte, pero hasta los peores días son para el recuerdo y está claro que no volveré a ser el mismo que era y espero ser algo mejor como persona, amigo, hijo, maquetista o diseñador industrial. Es una experiencia irrepetible, para mí ya es parte de mi vida y lo será siempre, y tengo recuerdos que me llevo conmigo que no los cambiaría por nada.
Lo otro que tendría que agradecer es a las personas que me han acompañado en Dublín y desde España, cada día, no digo nombres porque no acabaría nunca y me enredaría más de lo que ya lo he hecho, pero ellos saben muy bien quiénes son. Se les quiere. Gracias por todo.