Después de dos meses de intensa actividad, los cinco equipos de estudiantes de las especialidades de diseño industrial y mobiliario, presentaron con éxito sus propuestas de diseño de bipedestador supinador para Clara. El reto del proyecto consistía en crear un producto de ayuda técnica atendiendo a exigencias ergonómicas, formales y de usabilidad , dentro de los parámetros de diseño libre, fácil montaje y fabricación accesible. La experiencia nos ha acercado a todos a la realidad del diseño colaborativo, con todo su potencial, visible en fuerza de las sinergias para el aprendizaje profesional y humano, y también con las dificultades propias del trabajo en equipo, asignatura pendiente en el modelo docente dominante.
Las propuestas fueron evaluadas por un jurado integrado por miembros de diferentes especialidades profesionales y personales: la madre de Clara, dos terapeutas ocupacionales, una mediadora cultural de Media Lab Prado, una profesora de ergonomía, dos profesores de proyectos y una representante del equipo directivo de la Escuela de Arte Diez.
Todo el equipo de profesores que hemos participado en el proyecto queremos mostrar nuestro profundo agradecimiento a todas las personas, estudiantes y colaboradores, que han hecho posible su desarrollo.