Se proyecta un coworking que rompe con los convencionalismos del trabajo de oficina. Convencionalismos que hacen del trabajo una tarea tediosa, estresante y monótona. Con el diseño de este espacio, se pretende fomentar aspectos positivos (alegría, creatividad, tranquilidad…), para lo que se emplean diferentes recursos como el color, los materiales, la iluminación…
Se propone un espacio de coworking ubicado en el área financiera de Madrid Capital. Este proyecto nace de las nuevas necesidades que la sociedad está experimentando. Vemos como cada vez es más común compartir espacios, y el ámbito laboral no se queda atrás. Este sistema de trabajo compartido, permite crear el medio idóneo, en condiciones de precio y servicios, para facilitar el desarrollo de particulares y empresas innovadoras e independientes.
Además, promueve la relación entre profesionales de diferentes campos, compartiendo ideas y originándose asociaciones inesperadas, que puedan dar lugar a la creatividad.
El coworking se sitúa en un edificio con una superficie de 1200 m2 distribuidos en dos plantas. Cuenta con numerosos espacios comunes con el fin de que las personas se relacionen e interactúen. El diseño empleado en todo el local, pretende destacar los propósitos mencionados anteriormente. Todo ello acompañado de una gama cromática colorida y alegre que evoca sensaciones positivas.
Lo más importante es conseguir que el usuario se sienta cómodo e integrado, por ello, se ha resuelto cada uno de los aspectos del proyecto en profundidad.
• Organización y distribución: el espacio se organiza mediante una sucesión de espacios contiguos; dispuestos alrededor de un espacio central y vinculados mediante la disposición radial y ortogonal del esquema circulatorio en torno a la zona central. Este esquema facilita el tránsito fluido de las personas por el espacio, por ende, se generan interactuaciones sociales, evitando el aislamiento de los miembros. Por otro lado, la división de las dos plantas (planta baja, zona de ocio compartida y 1o planta, zona de trabajo) otorga al usuario la libertad de elegir entre sociabilizar o trabajar de manera individual.
• Gama cromática: los paramentos representan un lienzo en blanco donde se aplicarán en proporciones y texturas variables, colores vivos, alegres, y cálidos; evocando sensaciones positivas implícitas en los mismos y en sintonía con los propósitos del proyecto.
• Formas: las formas de los paramentos y volúmenes del interior se resuelven redondeando las esquinas y se generan diferentes alturas de pavimento y techo para diferenciar los espacios sin excedernos en el uso de paramentos verticales que interrumpan la fluidez y limpieza visual.
• Iluminación: se tiene en cuenta la orientación del local y se aprovecha al máximo distribuyendo los espacios en base a sus necesidades lumínicas y afluencia. Por lo que respecta a la iluminación artificial, se emplea una retícula de down lights como base lumínica. Se escogen luminarias diferentes para cada una de las zonas del coworking.
• Piezas de mobiliario: escogidas meticulosamente, aunque son diferentes en cada una de las zonas, todas ellas mantienen un estilo claro.
• Vegetación: Se colocan próximas a las fachadas. No solo embellecen el espacio, sino que está demostrado que mejoran la calidad de vida.
• Desarrollo de la planta baja: la planta baja, desarrollada en profundidad para el proyecto, se compone de las siguientes áreas:
1. Recepción.
2. Office.
3. Trabajo colectivo.
4. Cafetería.
5. Sala de charlas y eventos.
6. Área de esparcimiento y juegos.