Se aspira a que el cliente descubra el perfume final, su perfección olfativa personal.
Más que una tienda se desea crear un lugar donde se puede hablar de perfumes, probarlos, identificar materias primas, familiarizarse con los grandes creadores; y donde uno también puede hacerse el retrato olfativo que resulta utilísimo a la hora de elegir los aromas que mejor nos van.
Se pretende crear un ambiente pulido y fresco que transmita la atmosfera de París. Se elegirán colores, materiales, módulos y organizaciones comunes a todos sus rincones evitando así caer en estereotipos turísticos y muy reductores de lo que en realidad es.
«Là, tout n’est qu’ordre et beauté, luxe, calme et volupté» Baudelaire. («aquí todo es orden, belleza, lujo, calma y voluptuosidad»)
Se combinarán módulos cuadrados con formas orgánicas y florales. Conseguiremos una mezcla interesante de orden y ligereza.
Los materiales y colores comunicarán a los clientes la manera de caminar, de moverse, de coger los productos, el tono de voz… será un espacio susurrado en el que sólo el ruido de los tacones en el suelo y de los frascos en las encimeras harán echo.
Campañas de escaparates:
La campaña de primavera encuentra su inspiración en el jardín de Versalles. Se transmite un mensaje de exquisitez, buen gusto y abundancia.
La fachada de primavera es una explosión de geometría verde. Habla de los jardines de Vesralles, y ¿qué es más primaveral que un jardín? Y, paradójicamente, ¿qué es menos geométrico y ordenado que la naturaleza?
La campaña de verano halla su inspiración en la botella del mar.
El mensaje es: «un perfume náufrago que busca la isla de tu piel». Esta frase pretende explicar que el perfume se transforma con el aroma de la piel de cada persona que lo lleva. Cada perfume es náufrago, está perdido, sin el complemento de la piel, cada perfume es absolutamente personal y diferente: la piel es una nota más en su composición.
El verano en Madrid es pesado, caluroso y muy silencioso, esta propuesta habla de ello: está detenido, en calma, horizontal… es ligera para todos los sentidos.
El otoño es una temporada del año nostálgica, con sabor a recuerdo.El mensaje de la campaña será «un recuerdo agotado, tan bello como inútil». hace referencia a la belleza de las cosas pasadas, al arte de perfumarse. Au jardín du Luxembourg vende perfumes basados en una tradición perfumista clásica francesa.
El atardecer, así como el otoño, remiten a la nostalgia, es la última belleza antes de la noche, del invierno…es una belleza potente y roja.
Esta campaña desea manifestar alegría, ritmo, luz y dinamismo.
El mensaje de la campaña es un mensaje de coqueteo y sonrisas : » el mejor complemento» que puedes llevar durante las fistas es tu perfume.
Para subrayar, señalar los perfumes, se emplearán barras de metacrilato de colores fluorescentes semitransparentes alrededor de cada expositor de perfume, funcionan como flechas que guían la mirada del espectador hacia el producto. Es una metáfora de las personas que se arreglan para subrayar su potencial, en particular durante estas fiestas…
Los aromas están presentes pero son a la vez transparentes, invisibles… el mensaje de la campaña es «existencia transparente, estela omnipresente»: es la definición de lo que es un perfume.
En invierno la vida se detiene, inverna… por lo tanto, en esta campaña, las propuestas serán transparentes, suspendidas en el tiempo, duras, sólidas…
El escaparate estará compuesto de planchas irregulares de metacrilatos de distintos colores pálidos. Se colocarán algunos por delante de los perfumes, otros por detrás… los perfumes están presente y ausentes en el escaparate ya que no están en primer plano…
San Valentín es una fiesta para celebrar el amor…Agitación, alegría, inquietud y deseo son los temas que se tratan en esta campaña. El mensaje que se desea transmitir es «un impulso de amor».
