Entrevista con Carlos Segura
Viernes,
29 de mayo de 1996
La
entrevista con Carlos Segura tiene lugar un jueves por la mañana a las nueve
y media, hora de Chicago, cuatro y media de la tarde en Madrid.
Corrió a cargo de Fernando Díaz Nájera y Eugenio Vega.
Nos ha llamado la atención desde el primer momento tu origen hispano.
Yo nací en Cuba en 1957. Mi familia es de origen español, Segura Viudas, que es una familia de cosecheros muy conocida, pero la guerra civil y el regimén de Franco les obligó a emigrar a Cuba por motivos politicos. Y lo mismo pasó, pero en otro sentido, con la revolución de Castro a principios de los sesenta. Nos fuimos a Estados Unidos en 1965: Primero a Miami; luego en 1975 me trasladé a Nueva Orleans y desde 1980 vivo en Chicago.
¿Cuando te empezó a interesar el diseño gráfico?
La verdad es que nunca estuve demasiado interesado por el diseño gráfico
en particular. De pequeño dibujaba como todos los niños pero no especialmente
bien como para pensar en dedicarme a ello.
Años después yo tocaba
en un conjunto musical, era batería; y me encargaba del camión y también
de las cosas de promoción. Hacía camisetas, pegatinas y todo ese tipo
de trabajos, ya sabes, para dar a conocer el grupo. Esa fue mi primera
dedicación en este campo.
Luego cuando dejé la banda mande el portfolio con todas estas cosas a
una agencia y me contrataron para una serie de trabajos.
¿Y donde estudiaste diseño?
No, nunca fui a ninguna escuela de ese tipo; mi dedicación a esto fue,
en cierto modo, un caso de inspiración divina.
Nos gustaría conocer tu opinión acerca de las enseñanza del diseño.
Bueno, siempre llaman estudiantes y mandan sus portfolios al estudio y
yo creo que hay muchas, demasiadas similitudes. Son todos iguales, de
las mismas características; son exactos. Para que los alumnos mejoren,
las escuelas deben permitir una orientación más personal y no preocuparse
tanto de las compañías que los vayan a contratar. Cuando se tiene demasiado
en cuenta el futuro profesional se coharta la creatividad.
Es mejor, entonces, un enfoque más libre sin demasiados contenidos técnicos...
Son necesarias ambas cosas. Los diseñadores deben ser también técnicos
sobre todo por el uso de los ordenadores que se han convertido en una
herramienta imprescindible. Pero también es cierto que todo esto se puede
aprender en casa con tu ordenador y los manuales de los programas sin
una formación especial.
Pero lo que es más difícil
de aprender es a pensar aunque esto es algo innato, una cualidad que se
tiene o no se tiene y que es necesaria para desarrollar tu talento. A excepción de un par de
escuelas no se enseñan cosas apropiadas par los diseñadores. Se enseñan
demasiadas cosas técnicas que se pueden aprender en los manuales. Lo que
hay que enseñar son formas de pensar más creativas que permitan un desarrollo
personal. Si tienes, por ejemplo,
un problema con una cuenta de automóviles debes pensar para no ser como
el resto de los creativos y encontrar una solución nueva que permita marcar
una diferencia; si no todas las soluciones serán iguales.
¿Por qué prefieres la tipografía a otras formas de expresión gráfica?
Cualquier trabajo puede y debe ser lindo. No entiendo ese tipo de planteamiento
en que se pueden presentar solución malas y no se pone todo el interés.
Yo empecé trabajando con anunciantes y trabajé durante quince años pero
no les gustaban las limitaciones. Abrí mi estudio pensando que los clientes
se irían a sitios mayores. Oh. That makes me mad!
Yo creo que no se puede rebajar la calidad por que un trabajo no sea importante. Hay dos tipos de trabajos;
el comercial y el experimental como la tipografía y permite más libertad.
Si te gusta la compras y si no no. En 1992 diseñé una tipografía para
una compañía que luego nunca usaron pero que, pasado un tiempo, todos
la querían comprar.
Parece que toda la nueva tipografía no está demasiado preocupada por la
legibilidad y otros problemas fucnionales. Es cierto que esto puede favorecer
una mayor creatividad, ¿pero qué pasa cuando tienes que diseñar un libro?
Pero esto no es nuevo: Cuando ves libros antiguos del siglo XII o del
XIII no son legibles. No puedes entender nada de lo que está escrito. Ahora, además, estamos
en un época diferente; nunca ha habido tantas tipografías ni han influido
tanto en el diseño gráfico y en nuestra vida como en estos tiempos. Pero
la tipografía es una forma de arte del mismo modo que la escultura o la
fotografía y dependiendo de los tipos que uses tu trabajo tendrá una personalidad
diferente. Se trata de usar en cada
caso un tipo adecuado para cada trabajo: Si Ray Gun se diseñara igual
que Life se hundiría y al revés. Cada tipo de lector espera algo distinto. Pero de todas formas siempre
me dicen lo mismo: No es legible. Yo contestaría que si no lo puedes leer
no es para tí, no va dirigido a tí. Yo trabajo mucho con Snowboard y la
MTV y todo ello pide una nueva tipografía. Las limitaciones no deben se
un obstáculo. Intento dar la máxima creatividad y nunca pienso que la
persona a quien va dirigido mi trabajo es idiota y no pueda entender lo
que yo estoy haciendo.
Háblanos de los diseñadores que más te han influido.
Fundamentalmente muchos creadores de Japón; son muy diferentes a los occidentales
y eso les hace más interesantes. Piensan distinto en el sentido de que
no tienen en la mente el producto sino los sentimientos del cliente. Y
también los ingleses como Brody. Neville Brody me interesa mucho.
¿Crees que programas como Fontographer son adecuados para el diseño de
las tipografías?
Si pero, esencialmente yo utilizo Adobe Illustrator, para dibujar las
letras. Es mucho más cómodo en
un primer momento y utilizo Fontographer después para configurar deinitivamente
la fuente. Odio el Fontographer, no me gusta nada pero ahí pulimos los
tipos y es ciertamente útil pero la mayor parte del trabajo la debes hacer
tu no el progrma. Lo que sucede es que hoy
día cualquiera que tiene ordenador piensa que es un diseñador. Es como
cuando apareció la fotografía el siglo XIX que cualquiera que tenía una
cámara creía que era un artista.